La prueba comprueba el estado del oído medio, la movilidad del tímpano y de los huesecillos del oído medio, evaluando la presión, así como sus reflejos de protección y la membrana timpánica.
Por medio de esta prueba se puede detectar factores como infecciones en el oído medio, otoesclerosis, entre otros. Al igual detecta la presencia o ausencia del reflejo estapedial. Su análisis proporciona información sobre enfermedades que afectan la movilidad del sistema tímpano osicular, sobre la función del nervio facial y sobre la localización de procesos que afecten al tronco cerebral. Debido a factores madurativos su utilidad debe considerarse a partir de los 7 meses de edad.
La Prueba de Función Tubárica se puede realizar con el equipo de impedanciometría, a través de los cambios de presión generados en el conducto auditivo externo permitiendo evaluar la funcionalidad de la trompa de Eustaquio (función tubárica). En otras palabras, se somete a la trompa a cambios de presión y se evalúa su capacidad de responder a ellos. Se realiza en pacientes con tímpano íntegro y en perforación timpánica.